Los ladrillos de mullita son materiales refractarios de alta calidad, compuestos principalmente por mullita (3Al2O3·2SiO2). Disponibles en dos tipos, los ladrillos de mullita sinterizados y los ladrillos de mullita de fusión eléctrica, se elaboran mediante un proceso que incluye la mezcla de materia prima de mullita sintética y bauxita de alta calidad, seguida de un prensado a alta presión y un horneado a temperaturas superiores a 1600°C.
Los ladrillos de mullita presentan una excelente estabilidad térmica y resistencia a la deformación en condiciones de alta temperatura, haciendo que sean ideales para aplicaciones industriales exigentes.
Este tipo de ladrillos mantiene su integridad estructural incluso en entornos donde se producen cambios bruscos de temperatura, garantizando su rendimiento en condiciones adversas.
Ofrecen una baja tasa de deformación térmica, asegurando que su forma y rendimiento se mantengan estables, incluso bajo altas presiones.
Los ladrillos de mullita son altamente resistentes a la corrosión, especialmente contra escorias ácidas, lo que los hace adecuados para diversas aplicaciones industriales.
Estos ladrillos son versátiles y se utilizan en diferentes industrias. Son ideales para: